25 de noviembre de 2011

Haciendo un pulso cabeza y corazón ♪ ♫


"No sé con quién cabrearme, si contigo o con el mundo entero. Si conmigo o con tu buena educación. El caso es que estoy cabreada. Me indigna que las cosas no salgan como quiero, y que el único remedio sea esperar la espera de no saber cuánto voy a tener que volver a esperar. Porque esa incertidumbre me agota, me cansa, y solo quiero deshacerme de ella, aunque sea por las malas y a la fuerza. Ojalá tuviera motivos negativos y perjudiciales hacia ti, y me diera igual esa espera porque ya no sería espera, sino olvido. Pero no, mi motivo es fuerte, convincente y arriesgado y no me gusta darle la razón a dicho motivo, pero cada vez que me lo digo y me lo quiero quitar de encima, solo consigo que me quede mejor cada vez que lo recuerdo."

No hay comentarios:

Publicar un comentario